La industria de la logística ha sido, y es, uno de los sectores económicos fundamentales. Es por eso que se trata de un rubro que busca innovar constantemente y esta innovación lleva ya una década centrada en la eficiencia, en la flexibilidad, en la tecnología y en el cuidado del medio ambiente. Para estar al día de lo que está sucediendo en el mercado, te contamos cuáles son las principales tendencias que se desarrollarán durante el 2023.
En estos últimos años la logística se encuentra en pleno auge y las empresas ponen toda su atención en esta industria para poder cumplir varios de sus objetivos.
Desde el 2020, con la explosión y el alza del e-commerce, se produjo un aumento de la demanda de centros logísticos, motivando una alta tasa de ocupación y la estabilización de los precios de renta, todo en un mercado con un crecimiento lento.
Pero, el crecimiento de este mercado es un desafío doble: por un lado están los desarrolladores que tienen que encontrar ubicaciones estratégicas para que los operadores puedan llegar lo más rápido posible al consumidor y, por el otro, las empresas, que también buscan una ubicación que les garantice una mayor eficiencia operacional.
Aún así, tanto brokers como analistas del sector sostienen que el mercado logístico de Buenos Aires terminó el 2021 con una marcada recuperación, lo que se tradujo en buenas perspectivas para el 2022 y, en algún modo, una proyección ascendente para el 2023.
Este 2022 comenzó con una marcada tendencia por los grandes avances tecnológicos y por las mejoras en el sector industrial que buscan el cambio hacia unas empresas más eficientes, flexibles, tecnológicas y automatizadas, considerando también el medio ambiente como un foco de interés. La industria 4.0, que se ha ido instaurando en las cadenas de suministro de las empresas durante los últimos años, va adaptándose y siendo más exigente según las necesidades y demandas del mercado.
Pero, para dirigirnos hacia el futuro, muchos de estos cambios perdurarán y se incorporarán grandes avances que serán necesarios tener en cuenta al momento de buscar obtener una ventaja competitiva en el mercado. A continuación te comentamos cuáles son las principales tendencias en la industria de la logística que se prevén para el 2023:
Almacenamiento en la nube:
Ahora es más fácil llevar un registro de toda la operación, ya que todo se guarda de forma automática en la nube contando con un acceso fácil y rápido a los datos que se necesiten.
Enfoque hacia la sostenibilidad:
No sólo para la cadena de suministro, sino que la sostenibilidad es un reto que están asumiendo todas las empresas en su totalidad. Y es que, la logística verde o logística sostenible busca una mejora en la conservación del medio ambiente sin perder eficiencia y optimizando los procesos actuales.
Transparencia a través de la innovación:
Ninguna tendencia es tan importante en 2022 como la transparencia dentro de la cadena de suministro.
Con una cadena de suministro transparente, se pueden identificar y eliminar los riesgos dentro de la red de suministro para así generar una ventaja comparativa. Esta transparencia se consigue de la mano de la digitalización y el empleo de tecnologías innovadoras. Por tanto, las empresas deberán analizar con lupa sus procesos logísticos el próximo año. De este modo, podrán detectar el potencial de optimización y, a continuación, explotarlo
Automatización de los procesos:
Parte de la transparencia se logra a través del uso de las tecnologías y softwares más avanzados. Estos son cada vez más recurrentes para reducir los riesgos y mejorar la productividad de los procesos empresariales, sobre todo en los almacenes. Si el negocio crece, crecen con él las complejidades y, pese a que son muchos los motivos de un posible fracaso si no hay un correcto control, el apoyo en sistemas de gestión facilita el proceso.
Por tal motivo durante el 2022 softwares como Warehouse Management System (WMS) tuvieron un gran auge. Este sistema de gestión de almacenes también conocido como Software SGA por sus siglas en español, a través de su programa WMS permite controlar la organización y las distintas operaciones propias del almacén. El software controla en todo momento los materiales del almacén, desde el mismo instante que ingresa la materia prima hasta su salida de las instalaciones.
Drones y robots:
Motivados por la búsqueda de una logística más verde y la automatización, el uso de drones y robots para el reparto de productos es un proyecto que se viene gestionando hace muchos años y una realidad muy próxima.
Algunas empresas, como Amazon, ya han hecho pruebas para repartir a través de drones, aunque todavía no se han aceptado.
Por otro lado, también crece el desarrollo de soluciones de conducción autónoma con camiones automatizados. Por supuesto, esto tampoco supondría la reducción de personal, sino que la inteligencia artificial sería un complemento para hacer más fácil y eficaz el trabajo de los empleados.
Última milla:
El comercio online está en auge y, con él, la famosa «última milla». Mientras que los consumidores están encantados con tendencias como la entrega en el mismo día o el envío/devolución gratis, el sector logístico lo vive justo al revés. Los crecientes volúmenes de transporte, la mayor urbanización y los altos costes generan retos enormes cada día a esta industria.
La respuesta a este problema podrían ser los micro almacenes: Se trata de pequeños almacenes que acercan la mercancía a los clientes, sobre todo en áreas densamente pobladas. Contribuyen a organizar la última milla con mayor rapidez y eficiencia, y a dar respuesta a la creciente demanda de entregas inmediatas.
Los NFT y Blockchain:
Estos dos conceptos, que tuvieron un importante rol durante el 2020 y el 2021, se han ido desarrollando hasta adaptarse a los diferentes sectores.
Una mejora en la encriptación de datos, ciberseguridad, y mayor rapidez y ajuste en la trazabilidad a tiempo real son algunas de las principales ideas por las que los negocios logísticos deberían apostar este año.
El 2023 será el año de la innovación. Nuevas tecnologías y una atención especial sobre la sostenibilidad. La transparencia y una gestión de riesgos de la cadena de suministro bien organizada serán la clave del éxito. Aquí puede resultar ventajoso el uso de tecnologías innovadoras para generar esta transparencia. De este modo, se puede aumentar el potencial de optimización para, en última instancia, asegurar la continuidad de la cadena de suministro.
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